-No siempre fue marcador de punta, ¿dónde comenzó jugando?
-Sí, en Ferro, en divisiones inferiores hasta la Quinta. Ahí tuve la oportunidad de empezar a entrenar con la primera y debutar de wing izquierdo, una especie de cuarto volante. Fue allá por el año 1975, hasta que después volví al puesto habitual.
-¿Se acuerda del día del debut?
-Sí, sí, me acuerdo. Fue contra Atlanta, ganamos 1 a 0. Uno que debuta, el primer partido lo recuerda siempre.-Un referente que haya tenido en su época como jugador de fútbol.-El Chivo Pavoni, marcador de punta de Independiente. Me reflejaba mucho en él cuando era chico, me gustaba por su coraje, por su garra.Había muchos marcadores de punta buenos en esa época, pero a mí me gustaba el Chivo Pavoni.-¿Cómo se hace para jugar tantos años en un mismo club? Hoy a la distancia parece imposible, porque los jugadores duran prácticamente un campeonato en un club y luego ya se están yendo.-En principio, fue otra época. En mi caso se dieron dos o tres situaciones, por un lado buenas y por otro no tan buenas. Porque mientras yo estuve jugando tuve la opción de ser transferido. En su momento una de las primeras opciones fue Independiente, otra fue Boca.Y después, ya en el año '88 y con 33 años, fue una posibilidad de ir a River. Tuve contacto con el presidente, una revista del club me sacó fotos con la camiseta de River. No se dio por una diferencia económica.Después, al año siguiente, me fui del club.Por un lado era bueno, porque estabas en un club que no necesitaba vender. Y cuando venían a comprar a un jugador de Ferro, la cotización era muy alta. Entonces, no había como hoy la necesidad imperiosa de vender o regalar a tal o cual jugador, o venderlo barato.Ahora bien, como jugador me hubiera gustado tener esa posibilidad de haber sido transferido, pero no me quejo. A nivel deportivo creo que gané cosas importantes, aunque me hubiera gustado tener un paso por un equipo más popular o más grande. Pero bueno, tuve prácticamente 25 años ininterrumpidos de carrera en un club. En lo mío prevaleció la familia, prevaleció esta profesión, que la tenés que saber manejar. Porque en un momento te encontrás haciendo lo que te gusta, siendo popular, tal vez teniendo fama. Entonces para muchos no es fácil, yo me apoyé en mi familia y eso me llevó a tener una vida normal.¿Qué es una vida normal para un deportista? Es el entrenamiento, que es lo que te va a llevar a tener un buen rendimiento. El vivir para esto, el cuidado personal, tener una vida ordenada. Y después, como yo le digo hoy en día a mis dirigidos, el jugador de fútbol es privilegiado.Hay muchas personas que quieren trabajar en lo que les gusta, o han estudiado y no se les da a cualquiera. Y por ahí al que se le da no lo sabe aprovechar
.-¿Qué técnico lo ha marcado más en su carrera como futbolista?-Y... trabajé 14 años con Carlos Griguol. Fue un poco el que nos educó, no solamente en lo profesional sino que también en lo personal, en lo familiar. El nos aconsejaba mucho en lo que era el cuidado. Si el día de mañana uno tomaba un dinero, saber en qué invertirlo. Vos sabés que hoy en día la mayoría de los futbolistas toma un dinero y se compra su auto, su celular y parece que ya está hecho.Creo que hoy es muy importante saber que tenés que ganar la mayor cantidad de dinero posible en esta profesión y para eso tenés que jugar en tal o cual club, tenés que apostar a una transferencia.Carlos Griguol fue muy puntilloso en ese aspecto, sobre todos con los muchachos que eran del interior. Viste que cuando vos llegás del interior, pensás que llegás y te pasan cosas como esas y ya parece que tenés el mundo en tus manos. Y es ahí donde uno se equivoca.En lo profesional, fijate que salió una camada muy importantes de técnicos. Después te puede gustar la ideología o no, pero son personas que han marcado un rumbo. Uno trata de sacar siempre lo positivo de cada uno.
-¿En qué año llega a la selección?-En el '83. Asume Bilardo y en la primera lista que da estamos ahí con Carlitos Arregui, nunca me voy a olvidar. Era algo poco usual que en la selección argentina estuvieran dos jugadores de Ferro. Ahí arrancamos.Para esa oportunidad trabajé mucho y dije que no la iba a desperdiciar.Tuve la suerte de jugar, de ahí, todo lo sucesivo. Eliminatorias, amistosos, giras, hasta que me sacaron la segunda amarilla contra Uruguay, quedé suspendido y después no pude jugar la final del mundo.Igual estuve hasta 1988, que Carlos habló con la mayoría de los muchachos que éramos más grandes. El tenía que optar y éramos un grupo de jugadores de 33, 34 ó 35 años y no podía llevarnos a todos. Y bueno, quedó el Tata Brown, quedó Valdano, quedé yo, Trobbiani, una serie de muchachos que no pudimos llegar al Mundial del '90.
-¿Cuántos goles en Primera División?
-28.
-¿El que más recuerda?-
Hice varios goles importantes. Le hice un gol a River sobre la hora, que perdíamos 1 a 0, empatamos y después ganamos a penales -era la época en la que se definía por penales (N de la R: fue en la temporada 1988 - 1989, cuando los partidos terminaban empatados se jugaba una definición por tiros desde el punto del penal y el ganador sumaba 2 puntos, mientras que el perdedor se quedaba con el punto del empate).Le hice dos goles a Racing, le hice dos goles a Temperley, pero el que más recuerdo es un gol de cabeza que le hice a Gimnasia y Esgrima La Plata, porque ese día justo era el cumpleaños de mi papá, que ha fallecido.Hubo goles importantes para tal o cual clasificación, pero personalmente ese es el que más recuerdo, porque justo ese día era el cumpleaños de mi viejo. Mi papá siempre fue el que ayudó, el que me apuntaló, el que me bancó para que fuera jugador de fútbol. Tuve la desgracia y la suerte que falleció mi papá y a los pocos meses tuve la opción de estar en Primera. Pero siempre tuve un compromiso con él. Con Ferro no concentrábamos nunca; entonces, cada vez que teníamos que jugar un partido un domingo o un sábado, pasaba a dejarle una flor.
-¿Qué significó para usted ser compañero de aquel Diego Maradona?
-Si bien el grupo era uno más, porque él quería ser uno más. Sin dudas es un tipo que tiene una diferencia con cualquier jugador normal muy grande. Verlo ya calzarse, cambiarse y lo que era en los entrenamientos, vos veías que quería ser el mejor y fue el mejor. Yo creo que es un jugador dotado. Como hay científicos, hay médicos, hay gente que tiene ese don, Maradona para el fútbol siempre fue un superdotado.
El gran Carlos Salvador Bilardo le dio una vez:
- Garré, vos, sos un fenómeno, te putean hasta en los partidos a beneficio.
Posted by NC
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