A raiz del incidente de Gerad en un bar la prensa saco esto: No fue un hecho aislado para el fútbol inglés. Días atrás, su compañero Jamie Carragher había protagonizado una pelea en la puerta de su casa. Además, Jonny Evans, defensor del Manchester, ya había sido arrestado por un caso de violencia sexual. Y el volante Joey Barton, del Newcastle, estuvo seis meses preso por agredir a un adolescente hace un año. Todo esto se suma a la novela del ex jugador Paul Gascoigne, de quien se supo que pasó la Navidad solo, en un hotel, bebiendo. Según la prensa inglesa, "el padre de todos los desbandes" es George Best, irlandés que fue símbolo de excesos y falleció en 2005.
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