Brian Fuentes, un delantero rubio y veloz que jugó en Banfield, Deportivo Italiano, Arsenal y Nueva Chicago, conoció otras costumbres en México, Portugal –en la exótica Isla de Madeira–, Uruguay e Italia –estuvo siete meses sin cobrar en su primera experiencia–, pero ahora es el delantero sensación del Selangor FC, una especie de Boca de Malasia, capaz de reunir a 80 mil personas en algunos partidos. “Fui recibido como si fuese Batistuta (ja, ja). Este es un país muy raro. Los habitantes son una mezcla de indios, malayos, musulmanes y chinos. Hice la pretemporada en Indonesia y la verdad es que no paré de sorprenderme, como cuando llegamos a un aeropuerto y nos esperaban con una especie de batucada, con gente disfrazada y bailes propios del lugar; parecía una macumba”, transmite a la distancia. Señala que los argentinos en Malasia son cuatro, más el director técnico: “Nos juntamos seguido a comer asados” y remarca que, pese a que el fútbol es muy popular en ese país, “los hinchas son diferentes, disfrutan de otra manera, no como en la Argentina que perdés y entran al vestuario a amenazarte con armas, como me pasó una vez en Nueva Chicago”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario